Por Indira Carpio Olivo
Dije siempre “gracias-por favor”
me hice la cruz antes de dormir
cepillé mis cabellos, mi pecho
y nunca fueron amables
Rompí una a una los cuencas del rosario que me ataba
Sólo eso bastó para escupirme
y clavarme a un madero rojo sangre
Camino a la montaña
y la sal del agua no entiende
que no invocar al género humano es una decisión
Bachué, la madre del género humano según leyenda chibcha |
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