Luego del escándalo suscitado por la divulgación de un cable interceptado por Wikileaks y la revelación de las verdaderas razones de la salida del camarada Eduardo
Samán del ministerio de Comercio, nos hemos permitido redactar esta
nota con una guía anexa para los que tengan necesidad de sacar a algún
“chavista de verdad” de su camino o que le aprueben algo que en realidad
solo le beneficie a usted o a un grupito de gente por encima de un mar
de pueblo.
¿Es
usted un empresario con mucha plata y mucho poder, con un problema por
alguna ley reglamento o ministro de esos “chavistas” que lo están
molestando? O, por el contrario, ¿se metió en tremendo lío con el Estado
y no sabe cómo salirse de él? Bueno, se acabaron sus problemas, acá les damos una guía práctica para traducir un proyecto de su interés a un “lenguaje Chavista” que por supuesto no lo sea:
1. Comience
con un saludo Revolucionario, Marxista, Leninista, Zamorano,
Robinsoniano, bolivariano - esto de modo que el que lo lea sepa que
usted ha leído y apoya los preceptos de estos personajes -, aunque ni
por casualidad sepa quiénes son.
2. Diríjase
al (os) futuro (s) lector o lectores de este documento en términos como
“camaradas”, “compañeros de lucha”, “revolucionarios”, no le
recomendamos el uso de la palabra “cuadros” porque puede ser que quien
lo lea no sepa el significado y, si usted que tampoco lo sabe, caería en
un dilema.
3. Jamás
se refiera a los pobres como pobres, ¡no! Y menos como ordas o lumpe.
Para eso use palabras como: Proletariado, trabajadores o pueblo (si
anexa alguna foto suya abrazando a uno excelente).
4. Si
en su proyecto plantea la expropiación de alguna comunidad o terreno
usado por estos “pobres” no hable de “quitarles eso” o “eso vale más de
la vida de esa gente” es muy práctico el uso de oraciones como: este spa
traerá un gran beneficio a la comunidad, o es mejor que estas
comunidades sean reubicadas para que el humo revolucionario que saca mi
empresa no los afecte.
5. Si
su caso es el de la desviación de recursos de obras sociales para su
proyecto es buenísima esta frase: “en toda revolución hay que hacer
sacrificios, ha llegado el momento histórico de que estos compañeros lo
hagan”.
6. En
el caso de la necesidad de que aprueben alguna ley que lo beneficie
económicamente en perjuicio de la comunidad en general recomendamos el
abocamiento de frases más complicadas para su entendimiento, pero que no
lo excusan de usarlas: “el capitalismo que pretende atacar a nuestro
proceso no quiere que se apruebe esta ley revolucionaria porque desean
impedir que el dinero vaya al pueblo que beneficia” (claro el pueblo
beneficiado es usted y sus compadres).
7. En
caso de que explote algún escándalo o chanchullo que usted haya
realizado, no se le ocurra admitir los hechos o buscar un abogado. Eso
se soluciona de la siguiente forma: realice una declaración pública en
la que haga un llamado a la unión de todos los venezolanos ante la
eminente amenaza del imperio con su guerra de cuarta generación y que
gracias a los medios privados tarifados y otros quinta columna (grábese
esas dos palabras, le servirán toda la vida), están tratando de manchar
su revolucionario nombre, y luego explica que esa
plata usted no se la robó, que solo la guardaba para que algún
escuálido no se la robara, que estaba a puntico de devolverla.
8. Si
desea proponer alguno de sus empleados para ministro, el comienzo del
párrafo ideal es el de: propongo a este camarada surgido de las luchas
de Prados del Este y perteneciente al concejo comunal de terrazas del
Club Hípico (así no exista ese concejo comunal, nadie va a revisar eso).
9. Y
para finalizar, si lo que desea es salir de algún ministro fastidioso
que se crea que cambiará al mundo o que ese es un puesto para ayudar a
los pobres, le tenemos la frase imbatible, con un 99.9% de efectividad: “
felicito al camarada ministro, por su revolucionaria labor al frente de
este gran ministerio, pero llegó la hora de que las nuevas generaciones
den un paso al frente para el relevo de la vanguardia revolucionaria, y
nuestro camarada tenga un merecido descanso, preparado para la próxima
misión que se le asignará muy pronto (claro usted jamás debe permitir
que ni de visita vuelva a entrar ese ser a un edificio del Estado)”.
Esperamos que
esta guía práctica sea de su ayuda, ya que está garantizada. Si tiene
dudas pregúntele a la Cámara Venezolana de Medicamentos, que ya se benefició con nuestros consejos.
Ja ja ja ja, me cagué de la risa con tu escrito. De verdad que bastante acertado, debería también haber una guía de "vestuario chavista". Cuando puedas pásate por mi blog que publiqué un artículo "candela" hace dos días. Saludos
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